ARTE MUDEJAR

Una de las palabras posiblemente más repetida a lo largo de todos los artículos que hemos ido hablando sobre la historia y los monumentos de Zaragoza ha sido la palabra “Mudéjar”. Esto se debe a la gran importancia de este tipo de arquitectura no solo en la ciudad sino igualmente en sus alrededores y en todo a Aragón; tal es su relevancia que se ha convertido en Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO. Pero a pesar de esto no hemos dedicado un post exclusivo al mudéjar zaragozano, por lo que nos disponemos a ello en esta entrada. Son tantos los ejemplos que es imposible englobarlos en una por lo que lo dividiremos en sendos escritos.


El Mudéjar: Significado y algunos ejemplos.
Antes de empezar con algunos monumentos mudéjares de la ciudad, queremos volver a recalcar el significado de la arquitectura mudéjar. Se trata de un tipo de ornamentación y materiales típicos de los métodos de construcción islámico (cerámica, ladrillo, Yeso, etc.) pero elaborados en edificios de época cristiana como en iglesias, palacios o monasterios. La mayoría de las veces elaborados por propios mudéjares, musulmanes que quedaron en territorio cristiano tras la Reconquista.

Entre los ejemplos que ya hemos visto anteriormente destacamos el Muro de la Parroquieta de la Seo de Zaragoza, en un lateral de esta cerrando la capilla de San Miguel y elaborado bajo el mecenazgo de la familia Luna entre la que se encuentra el Papa Luna, Benedicto XIII. Otro ejemplo es la Aljaferia y en concreto la parte del palacio cristiano-mudéjar en la que destaca el salón de Pedro IV y los magníficos alfarjes de madera del techo y por ultimo destacar la iglesia de San Pablo ejemplo máximo de iglesia gótico-mudéjar con un esquema de nave única con capillas entre los contrafuertes y cabecera poligonal. Destaca su torre octogonal con decoración de cerámica, paños y frisos de arcos entrecruzados.

San Miguel de los Navarros

Está situada junto a una puerta de la muralla medieval (este) lo que le da un aspecto de iglesia fortaleza. Edificada en el siglo XIV repite la estructura vista en San Pablo aunque un poco modificada con la ampliación producida en el siglo XVII en la que se añade una nave lateral, un coro y una nueva portada, todo de estilo barroco, además de sustituirse las naves de crucería góticas por las de medio punto con lunetos y decoración de yeserías. Destaca en la portada una hornacina avenerada con la imagen de San Miguel Arcángel luchando con el demonio.
Posiblemente donde mejor se vea este estilo mudéjar sea en su exterior tanto en el ábside con decoración de frisos de arcos que forman rombos o de las cruces florlisadas entre los vanos; como en su impresionante torre del siglo XIV pero terminada en el siglo XVI, con forma prismática cuadrada y decoración geométrica, de arcos entrelazados o de tipo islámicos con lazos, cintas y estrellas como ocurre en sus vanos.

Iglesia Parroquial de Santa María Magdalena

La iglesia de la Magdalena es tan importante que da en la actualidad un nombre a todo un barrio del Casco viejo. Se sitúa al final de la calle mayor,  donde se puede observar su maravillosa torre que imita los ejemplos mudéjares turolenses de las torres de San Martin o San Salvador. Como San Pablo son dos torres, una interior envuelta por la exterior, con una rampa interior que conecta a ambas. En su ornamentación destaca sus cerámicas blancas y verdes entre motivos geométricos y arcos mixtilíneos de ladrillo. Una belleza la de esta torre que aumenta por las noches al ser iluminada convirtiéndose en uno de los faros del barrio.

Respecto a la iglesia esta se encuentra cerrada en la actualidad por restauración. Presenta el modelo de San Pablo y San Miguel pero con la peculiaridad que la portada se encuentra cegada y la entrada principal se abre en el ábside. La decoración de sus muros se realiza a través de ladrillos que forman denticulados, rombos y frisos de arcos mixtilíneos.

El Torreón de Fortea

Es el conjunto civil medieval más importante de la ciudad y de los poquísimos que hay en Zaragoza de este periodo. Se trata de una edificación del siglo XIV-XV, con una tipología de estancias superpuestas, 5 en total, más un sótano abovedado y en la parte superior una galería de arquillos que se copiará en los palacios de épocas posteriores. Al exterior se abren vanos bíforos con ornamentación típicamente gótica, mientras que los balcones fueron abiertos en época posterior.
El torreón está enmarcado por dos edificio que conforman el conjunto total; uno más antiguo que da a la vecina calle del Temple que queda enmascarado por su fachada del siglo XIX; y el que da a la Plaza San Felipe que presenta la tipología de los palacios urbanos zaragozanos o “casas” que hemos visto en los post de La Maestranza o el Palacio de Sastago. En la actualidad es propiedad del ayuntamiento que los utiliza para actividades de tipo cultural.